La Administración Federal de Aviación (FAA) emitió un nuevo comunicado dónde exige a Boeing que proporcione datos adicionales antes de que la agencia apruebe un extenso y riguroso proceso de inspección y mantenimiento para volver a poner en servicio los aviones 737 MAX-9.
"Estamos trabajando para asegurarnos de que nada como esto vuelva a ocurrir", dijo el administrador de la FAA, Mike Whitaker. "Nuestra única preocupación es la seguridad de los viajeros estadounidenses y el Boeing 737-9 MAX no volverá a surcar los cielos hasta que estemos completamente convencidos de que es seguro".
Tras revisar las instrucciones de inspección y mantenimiento propuestas por Boeing, la FAA determinó que necesitaba datos adicionales antes de aprobarlas. En consecuencia, la FAA está exigiendo inspecciones de las puertas de 40 aeronaves.
La FAA se siente alentada por el carácter exhaustivo de las instrucciones de Boeing para las inspecciones y el mantenimiento. sin embargo, en aras de mantener el más alto nivel de seguridad, la agencia no aprobará el proceso de inspección y mantenimiento hasta que revise los datos de la ronda inicial de 40 inspecciones.
Tras una revisión completa de los datos, la FAA determinará si las instrucciones cumplen las normas de seguridad más estrictas. Si la FAA aprueba las instrucciones de inspección y mantenimiento de Boeing, se exigirá a los operadores que apliquen ese régimen a todos los aviones antes de que vuelvan a entrar en servicio.